Flexibilidad

Nuestro caminar en la vida va enfocado a alcanzar el equilibrio perfecto. Buscamos en un lugar y en otro la dirección exacta para alcanzar el objetivo que fijamos. Aunque ¿quién sabe lo que la vida tiene preparado? ¿Estamos realmente dispuestos a ser flexibles? Este si que es realmente el gran reto, estar dispuesto adaptarse a todas las situaciones y cambios que, con humildad, tenemos que reconocer que en muchas ocasiones, ni remotamente nos imaginamos de que se trata. Tener la capacidad de adaptarse sin resistencias a los cambios, en una de las virtudes a seguir desarrollando por la humanidad para poder continuar el camino de evolución natural que llevamos. Es en este punto, en este apartado, cuando más me gustaría fusionarme con la naturaleza, por lo adaptable y flexible que es y confío tener esa capacidad de fluir según las situaciones que se van presentando, sin sustos ni bloqueos. Me asalta en distintos momentos de la vida, qué es lo que voy a encontrar al otro lado de la puerta o en el siguiente paso que voy a dar. Por eso en estos momentos disfruto de los paseos por el monte y sigo observando a los árboles y a las flores para aprender de su flexibilidad. Es tiempo de seguir creciendo en Confianza, Fe y Esperanza. El triunfo es un proceso que exige cambios, acción y formidables dotes de paciencia. Sin juicios, sin ira ni amargura, sin hostilidad ni remordimiento, sólo mostrar una tranquila disposición a aceptar en lugar de combatir. Los pensamientos, los sentimientos y la conducta se van concentrando cada vez más en la realización del propósito. Siendo flexible de pensamiento me adapto sin caerme. Decido bailar al ritmo del poderoso viento, su flexibilidad me ayuda a aprender.